jueves, 10 de mayo de 2012

Niños sobre ruedas

Y por supuesto, que no me refiero a los niños que por circunstancias desgraciadas se ven obligados a usar una silla de ruedas...

Niños motorizados en crianzaconapego.com

Observo gran cantidad de niños que pasan su día a día “motorizados”, van al cole y regresan del mismo en coche, van a las actividades extraescolares en coche, van a comprar a centros comerciales en coche en los que una vez allí se suben al carro de la compra para que los padres puedan operar lo más tranquilos posible... en fin, cuándo caminan esos niños?
No hagamos de nuestros niños futuros adultos sedentarios!

 Hay niños que entre semana apenas pisan la calle.

Sí, seguramente muchos de ellos estén apuntados a algún deporte o el fin de semana lo pasen correteando por ahí, no lo dudo. Pero reivindico el paseo a pie, el ir a los recados a pie, porque estoy convencida de que aporta muchísimo más a los niños que el moverse en coche para ir a todas partes. Es por las prisas y la falta de ganas que se recurre demasiado a ir “sobre ruedas”, pero seguro que si nos organizamos un poco mejor o cambiamos un destino por otro parecido pero más cercano, se puede prescindir bastante del coche y merece la pena.  Me parece que es más reconfortante volver a casa dando un paseo y charlando, tras una jornada escolar, que metiéndose en un auto...
Y no solo se abusa de los automóviles sino también del carrito, pasada cierta edad, los 3 años, la verdad es que la sillita de ruedas se debiera dejar de usar, al menos de manera cotidiana. Los niños están preparados para hacer trayectos a pie, claro, no todo lo rápido que nos gustaría y con diversas paradas, pero es necesario que nos adaptemos a su ritmo porque tanto del paseo como de los recados a pie, se aprende y mucho.

Ir a pie, saludable y ecológico

Hay gente de mi entorno que se sorprenden de lo “andarina” que es mi hija, la verdad es que aunque usé mucho con ella la silla de paseo, nunca fue un abuso y desde poco antes de cumplir los 2 años ya era capaz de hacer distancias bastante largas a pie sin cansarse. Es bueno acostumbrarles a caminar hacia nuestros objetivos según vayamos observando qué distancias son capaces de abordar.

Recuerdo mi niñez, iba y volvía a pie del cole, de la academia, de la catequesis, a misa, de paseo, a recados... solo usábamos el coche de viaje o para desplazamientos lo suficientemente largos. Hoy en día observo a familias que lo usan para ir a 500 metros! Por supuesto que en ocasiones es necesario pero se abusa mucho de este medio. 
Lo importante es que ellos empiecen a valorar las distancias, que descubran una tienda en el camino o que se paren a contemplar un perro, un bebé, una persona mayor o cualquier cosa que llame su atención. Que aprendan los peligros y las normas de la calle. Que chapoteen en charcos cualquier día de lluvia, que aprendan las calles de la ciudad en la que viven, que sepan que hay muchos caminos que nos llevan a casa. Y si aprieta el cansancio recurrir, por qué no, al transporte público, que también es una aventura y es más ecológico!

Muchos de estos niños que van a todas partes sobre ruedas son los típicos que el raro día que van a pie se cansan todo el tiempo, no saben comportarse en la calle, no respetan las reglas de tráfico ni tienen en cuenta al resto de transeúntes.

Os dejo este vídeo, el final de la película "Cría cuervos", que siempre me ha gustado pues me recuerda a mi época de colegial, una época en la que casi nadie usaba el coche para ir al cole, salvo aquellos colegios alejados a los que había que acudir en autocar...

16 comentarios:

  1. Como siempre, María, me ha encantado tu post!
    Estoy completamente de acuerdo con el tema que propones y me parece muy bien traido y muy interesante para reflexionar sobre ello. Gracias!

    Ánimo y sigue escribiendo así. Ya espero tu próxima entrada...

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  2. Estos niños acabaran como algunos vecinos mios que necesitan el coche hasta para ir a tirar la basura al contenedor...

    Son tan incapaces de caminar algunos que para no aparcar a 20 metros de donde van, prefieren quedarse en doble fila a solo 10 metros de la tienda y molestar a todo el mundo.
    Pero nada, al final no molesta a nadie, ni a la policia que nunca dice nada... ah claro también tendrían que bajarse de su coche!

    Que asco de vida

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    1. Anónimo, no me digas que tienes vecinos que usan el coche para ir a la basura...!
      Sobre el respeto a las reglas de tráfico, eso es otro tema, que también tienes razón.
      Gracias por dejar un comentario!

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  3. Mi marido dice esto mismo que tú dices a menudo. Ahora todo nos parece lejísimos, queremos que los sitios estén nada más salir de casa y buscamos aparcamiento en la misma puerta. Tienes mucha razón... Por ello es cada vez mas frecuente encontrar niños que se cansan por todo, que son vagos para caminar, que les cuesta moverse, ¡y es que la culpa la tenemos los padres!
    Yo también entono el mía culpa porque a veces recurro al coche para distancias cortas que no me supondrían más de 10 minutos andando.
    Mi reflexión al respecto es que vamos demasiado deprisa. El tiempo siempre nos aprieta y somos incapaces de pararnos a tomar aire, respirar y disfrutar de un agradable paseo, aunque sea para ir a comprar el pan!

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    1. Así que coincido con tu marido, pues a hacerle caso, menos coche y más suela del zapato :)
      En serio, merece la pena enseñar un mundo sin tanto coche a nuestros niños.
      Gracias

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  4. Yo nunca he entendido por qué se coge el coche para ir al lado de casa para actividades sencillas (compras pequeñas, ir al cole, a la guarde, a tomar algo...) en mi pueblo se hace mucho, fíjate que además no es muy grande.
    Como dices creo que es bueno que los niños anden. Mi hija que todavía no tiene los veinte meses aguanta distancias considerables (algunos hasta se sorprenden con lo pequeña que es) y en nuestro paseo nos cruzamos con un montón de niños más mayores en sillita, no se cansa y además quiere ir andando (yo la llevo en el mei tai cuando tengo algo de prisa), así que estoy contigo.

    Un abrazo

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    1. Me alegro de coincidir y de saber que a Minerva le gusta tanto caminar, eso es buenísimo, y la verdad, es algo que normalmente está al alcance de todo aquel que se lo proponga.
      Besos!

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  5. Comparto tu reflexión por completo. Me gusta que la Cereza camine, tal vez sea porque yo también lo hago y lo hice siempre, que tengo la idea de que es agradable y que el propio cuerpo, cuerpo y mente, te lo pide si creas un hábito. Por supuesto respetando cuando se cansan y piden brazos, pero al menos es un modo de darles la oportunidad y a la vez disfrutar del aire libre!
    Gracias, María M! Besos

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    1. Es cierto, inculcamos a nuestros hijos aquello que nos gusta, nuestras costumbres y aficiones. En mi caso también soy muy caminante, así que ella lo ha vivido desde siempre, como tu Cereza, besos para las dos!

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  6. Estoy de acuerdo contigo. En el pueblo de mi familia, que es bastante pequeño, la gente coge el coche para todo. Nosotros vivimos a sólo 15 minutos andando del centro de la ciudad y me preguntan si voy en autobus o en coche. ¡qué fuerte! Pues cómo voy a ir, andando. Y con el niño, también, que no, que no usa el carrito desde hace meses, que si se cansa lo cojo y punto, que sí, que tardamos mucho ¿Y qué? Será cuestión de gestionar bien el tiempo, digo yo.
    Que andar es bueno para todo!!!! Y puedes ver con él los escaparates, las hormiguitas del suelo, saltar cacas de perro, corretear, subir y bajar diez veces los mismos escalones...Divertidísimo, pero con una ración doble de paciencia, y ahí está el problema, que la gente va con prisas a todos lados. Otra cosita más para cambiar.
    Un beso.
    Te he dejado un premio en mi blog, puedes recogerlo cuando quieras, si quieres
    http://www.lagallinapintadita.com/2012/05/nuestro-octavo-premio-blog-original.html

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    1. Veo que tenemos la misma visión del tema, es una pena que se recurra tanto al coche hoy en día, luego la gente se queja de las consecuencias del sedentarismo, con lo fácil que es ponerle remedio.
      Muchas gracias!

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  7. Me gusta mucho tu reflexión y la suscribo totalmente. Yo no se conducir, por lo que me las he ingeniado para prescindir del todo del coche, siempre andando! El piso es céntrico y vamos a las pequeñas tiendas de barrio. Además la silla de paseo no parece gustarle a Marco y lo porteo, pero ya son 15 kilos, así que vamos alternando con la caminata. Cómo es chiquitín le gusta decidir la dirección pero bueno, con maña le reconduzco.
    Llevamos vidas con demasiada prisa y debemos parar, observar y respirar.
    Gracias por el Post. Un beso!

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    1. Veo que compartimos costumbres y que tú también eres una mamá "andarina", estoy convencida de que es una buena costumbre que solo puede traer beneficios, a seguir disfrutando de esos paseos sin ruedas ;)
      Un beso para ti también!

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  8. Yo pienso lo mismo que tú. Pequico y yo somos "andarines" también!

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    1. Pues bienvenidos al club, que con lo que observo en mi entorno, no es muy numeroso...!

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