sábado, 25 de febrero de 2012

Agitación del amamantamiento III

Como no hay dos sin tres, he aquí mi tercera y última entrada dedicada a este fenómeno que se puede dar durante la lactancia materna.

La agitación del amamantamiento hizo aparición en nuestras vidas a finales del verano alterando una lactancia materna prolongada que hasta ese momento había ido casi siempre sobre ruedas, y no ha desaparecido, así que llevamos conviviendo con ella unos seis meses.

¿Se puede seguir dando pecho una vez que se presenta la agitación del amamantamiento? En mi caso he de responder afirmativamente pero no es algo ni fácil ni agradable. Además en estos 6 meses el panorama ha ido cambiando y a peor pues si bien antes solamente se presentaba en las tomas nocturnas pronto hizo su aparición también en tomas diurnas. Aún así es algo con lo que hemos aprendido a convivir. La sensación está ahí y sigue siendo igual de desagradable pero en las nocturnas ya no molesta tanto pues mi hija hace tiempo que ya no se duerme al pecho si bien lo busca cuando se despierta en la noche, tan pronto lo encuentra muchas veces la separo en cuestión de segundos y ella también se ha acostumbrado a la nueva situación aunque todavía en ocasiones sufre por ello y yo lo paso muy mal.
Durante el día es raro que mi hija me pida pecho y si lo hace pues procuro aguantar lo máximo que pueda, aún así no es tan desagradable que cuando estamos acostadas.
Poco a poco vamos dando pasos hacia el final de la lactancia, de día ella lo busca cada vez menos, solo si está aburrida o algo la ha contrariado, eso sí lo que no perdona son sus tomas de nada más despertarse tanto por la mañana como después de la siesta, es su modo de hacer transición suave del mundo de los sueños a la vigilia.

Quizás al presentarse la agitación del amamantamiento tendría que haber buscado un destete rápido pero habría sido imposible hacerlo sin causar aún más sufrimiento del que nos causa la agitación del amamantamiento. Prefiero seguir así mientras pueda y que sea mi hija la que se vaya separando de algo que le ha acompañado desde que nació.
Prefiero que la leche materna le deje un bonito recuerdo, consciente o no.

12 comentarios:

  1. A veces he experimentado una sensación parecida, pero ha pasado. Ahora, el peque tiene 33 meses y tengo mal las dos tetitas. No sé si hongos, eczema o qué cosa, pero me duele bastante cuando mama. Yo no quiero dejar de darle el pecho, pero la verdad es que me resulta desagradable. Quiero que sea é quien decida cuando dejarlo. A veces deseo que la lactancia dure muuuuchos años más y otras que se termine mañana mismo.
    A ver en qué termina todo.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Entiendo tus sentimientos encontrados, en una lactancia larga hay tiempo para todo. Sabemos que el pecho es lo mejor y que es mucho más que alimento por eso en el fondo ahí seguimos. Yo muchas veces he deseado que lo dejara ya y otras me aferro pues sé que llegará el día en que esto termine y es hermosa esta conexión.
      Que te mejores :)

      Eliminar
  2. Uf Maria, tiene que ser durillo esta situación en la que no te sientes cómoda pero por lo que veo te da pena destetarla y tampoco quieres hacerla sufrir. Pero creo que si sigues es porque en el fondo os compensa a las dos.
    Ánimo y disfrutad en la medida de lo posible lo que os queda de lactancia.
    Un besazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es Carol, en el fondo sería peor forzar un destete y si te lo confieso sería imposible dado cómo veo a mi hija, su carácter y lo "enganchada" que está a su teti.
      Sí compensa, el beneficio es mayor pero ojalá esta dichosa agitación no se hubiese presentado nunca...
      Gracias!

      Eliminar
  3. Hola guapa. Te entiendo porque como sabes, he tenido rachas en las que he experimentado algo similar pero han ido pasando. La verdad es que creo que a mí me pasaría lo mismo en tu lugar, no me sentiría capaz de un destete brusco, si ella sigue demandando el pecho. Un abraxo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que yo pienso que es más fácil en cierto modo destetar a un bebé de meses que cuando ya se ha traspasado la frontera de los 18 meses, llegados a ese punto es mejor que sean ellos mismos los que lo dejen paulatinamente. Eso sí según van comprendiendo las cosas se puede ir pactando dónde de dar el pecho, en qué momento, etc, aunque no siempre es posible porque a estas edades tempranas aún les pueden mucho las emociones.
      Otro abrazo para ti!

      Eliminar
  4. María, se lo que es eso.. y cada madre debe buscar lo que mejor la venga.. que no siempre es destetar. Un besazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí Carol, ya sé que también has pasado por esto. Buscamos la solución que podemos, yo la verdad es que si ella dejase el pecho se lo agradecería porque creo que he cumplido esta etapa pero de momento no está por la labor, así que a ver hasta dónde llegamos.
      Gracias por tus palabras, un beso!

      Eliminar
  5. UY, Marían M. lo que os ocurre es exáctamente lo que nos pasa a mi pequeña y a mi, hace unos meses que nos ocurre lo mismo y en su momento leí la primera entrada que escribiste sobre este tema y te comente que me ocurría lo mismo, hoy, estaba recopilando información para escribir sobre esto de la "Maldita agitación de amamantamiento" en mi blog, y he encontrado tu post de nuevo. Mi hija tiene 23 meses, y por desgracia seguimos experimentando esta "agitación...", a veces me pregunto por qué nos tiene que suceder esto a mi y mi pequeña, realmente ella es la que mas lo sufre y tengo miedo de que le pueda afectar psicológicamente. Por las noches nos pasa como a vosotras, mi nena busca la teta y tras unos segundos se aparta en cuanto nota que yo me remuevo, para dormirse lo hacía con la teta, pero ahora, despues de varias crisis mias en la que me la he tenido que apartar, porque no soportaba la angustia, muchas noches busca la sillita de paseo ella solita, para que la pasee y se duerma, y una vez dormida la paso a la cama conmigo, a veces me siento mala madre, no puedo evitarlo! creo que esto ya no nos va a avandonar hsata el final de la lactancia, que al igual que tú, no se cuando ocurrirá porque mi hija está también muy enganchada, un abrazo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siento de veras que tu hija y tú esteis pasando por esto, amarga la lactancia, es una pena.
      A nosotras ya no nos ha abandonado así que hemos aprendido a convivir con ella... de algún modo es una respuesta del cuerpo de la madre, no te sientas culpable, no depende de ti.
      Leeré tu post con atención, encontrareis el camino de sobrellevarlo, seguro!
      Un abrazo.

      Eliminar
  6. Por cierto no se si tendrás inconveniente en que desde el post que estoy escribiendo sobre este tema ponga un enlace a las tres entradas que as escrito sobre esto, puede que ayude a otras mamás!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ningún inconveniente, al contrario, te lo agradezco. Es necesario que esto salga a la luz y que de algún modo otras madres se sientan acompañadas.

      Eliminar