sábado, 27 de agosto de 2011

Lo estaré haciendo bien?

Esta es la típica pregunta que nos suele asaltar de vez en cuando a los que tenemos hijos en edad de criar. No importa mucho el camino que hayamos escogido, las dudas razonables suelen aparecer irremediablemente. Y es que la crianza tiene sus luces y sus sombras, nadie nace enseñado a ser padre y sabemos que hasta si ponemos todo nuestro empeño en hacerlo lo mejor posible siempre puede haber fallos.

Y quizás en el hogar nos sentimos seguros y reafirmados en lo que estamos haciendo pero una vez que salimos al resto del mundo surgen comparaciones, comentarios, que nos pueden hacer tambalear en nuestras convicciones.
A esto hay que añadir que somos también fruto de la educación que un día recibimos de nuestros padres y que ya sea para reproducirla o para cambiarla esta memoria será siempre un espejo en el que de cuando en cuando nos miraremos para bien o para mal.

Pero es aún más fácil que las dudas nos surjan si además observamos que somos bastante diferentes de lo que mayoritariamente se ve en nuestro entorno, cosa que suele ocurrir en una crianza con apego, ahí sí que a pesar de lo muy seguros que nos sintamos, nos preguntaremos quizás más frecuentemente“lo estaré haciendo bien?”

Tampoco es algo malo cuestionarse, ya que en casi nada suele haber verdades absolutas, es bueno de vez en cuando para sacar conclusiones que nos permitan avanzar y mejorar.


A pesar de todo creo que la respuesta la tienen los niños, si ves a tu hijo feliz, contento, seguro y que además según va creciendo ves cómo va dando esos frutos que secretamente esperabas, es señal de que lo estás haciendo bien. En ocasiones, a mí me ha pasado, tenemos incluso la sorpresa de que la respuesta no viene solamente de los propios hijos sino de niños ajenos. Muchas veces estando con mi pequeña en los parques, jugando y disfrutando, hemos visto niños que se nos han acercado y se han quedado curiosos, observándonos con una expresión entre sorpresa y añoranza que me ha hecho decirme a mí misma ”pues sí, lo estoy haciendo bien”.

El criar con apego a un niño es darle lo que más necesita, el calor y la cercanía, que le hará desarrollarse en plenitud.

7 comentarios:

  1. Cuanta razón tienes Maria. Yo multitud de veces me he preguntado eso que dices.. ¿lo estare haciendo bien? Y me ha resultado revelador lo que has dicho "la respuesta la tienen los niños". La proxima vez que dude les "preguntare" (en sentido figurado) a ellos.

    Por cierto, sigo viendo paisajes muy conocidos :)

    Besotes!

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  2. Una reflexión muy buena María, cuestionarnos es inevitable, pero cómo tú dices, no es malo, si lo vemos como una oportunidad de mejorar y avanzar. Y lo único verdaderamente importante es ver como nuestros hijos crecen felices, si es así, es que no lo estaremos haciendo demasiado mal. Un abrazo

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  3. La crianza es una aventura maravillosa en la que todos aprendemos, grandes y pequeños. Gracias Carol y Mousikh!

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  4. Yo me lo pregunto cada vez que la bruja tiene un mal día, pero como normalmente la veo tan contenta, con tantas sonrisas y ganas de juerga que muy mal no lo puedo estar haciendo... Me ha gustado tu reflexión, besos

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  5. Cierto, es en esos días en los que lo tenemos más difícil que más nos lo cuestionamos pero después de la tormenta sale siempre el sol y no hemos de sacar conclusiones precipitadas. Saludos!

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  6. Me encanto tu reflexión, hace días que estaba con esa pregunta. Lo estaré haciendo bien? Y si bien lo quise expresar nunca pude hacerlo con la claridad y frescura que vos lo hiciste...gracias porque yo muchas veces lo siento y tambien al intelectualizarlo me quedo tranquila porque los bebés son felices....pero bueno....besos gracias, lucre

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  7. Encantada de conocerte madre Pikler, me siento halagada por tu comentario, gracias por compartir un tiempo con mi blog!

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